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La abeja ha vivido en estrecha asociación con los seres humanos durante milenios. Sin embargo, trágicamente, la conexión una vez íntima de la humanidad con esta criatura única se ha vido perjudicada por nuestros tratos cada vez más utilitarios y explotadores con el mundo natural. Ahora necesitamos urgentemente restablecer una relación más profunda, no solo por el bien de las propias abejas, sino por toda la naturaleza y, por supuesto, por nosotros mismos.
Lorenzen, un verdadero apicultor principal, proporciona numerosas ideas para permitir un compromiso más fructífero con el mundo vivo. Ofreciendo un enriquecimiento del conocimiento y la práctica de la apicultura, discute los orígenes de la abeja melífera, su relación con el reino floral, la digestión de la abeja, el tratamiento de las enfermedades de las abejas, así como las técnicas de apicultura apropiadas. También desarrolla conceptos espirituales sutiles como la idea de la colonia de abejas como "individualidad" y "alma grupal", proporcionando nueva profundidad y sabiduría a nuestra comprensión de cómo viven y trabajan las abejas.
Este pequeño libro, una joya escondida que nunca antes había aparecido en inglés, es una lectura esencial para cualquiera que se preocupa por el futuro de la abeja y el futuro de la humanidad.
C O N T E N I D O S:
Con el prólogo de Sebastian Irribarne
Prefacio
Introducción
Relación de la abeja con el reino floral
Sobre el tratamiento de las enfermedades de las abejas
El origen de la abeja
La colonia de abejas como individualidad y alma grupal
La cuestión de las técnicas apropiadas de apicultura
Epílogo
Notas
Sobre el autor
IWER THOR LORENZEN (1895-1976) nació en Harrislee Flensburg, Alemania, y comenzó su carrera como profesor en 1914. Mientras servía en la Primera Guerra Mundial, conoció la antroposofía, fundada por Rudolf Steiner, a través de un compañero soldado. Después de la guerra volvió a la enseñanza, pasando más tarde a la educación especial. Estrendó su propia escuela cerca de Hamburgo en 1949, donde permaneció hasta su jubilación. Habiendo trabajado como voluntario en el Instituto Estatal Zoológico de Hamburgo desde 1935 en adelante, Lorenzen también fue un biólogo que fue venerado por su amor y conocimiento de la apicultura, particularmente entre los agricultores biodinámicos. Publicó su trabajo clave sobre apicultura en 1938 y escribió otros nueve libros, así como numerosos artículos sobre el mundo de los insectos y los animales, la metamorfosis y la evolución.